En 2013, el consorcio CAF-Thales firmó con Metro de Santiago el contrato para suministrar nuevas unidades de metro automáticas para las líneas 3 y 6. El proyecto engloba, además del sistema de señalización, la fabricación y puesta en marcha de 185 coches con aire acondicionado, sistemas de información a pasajeros y cámaras de vigilancia entre otras innovaciones.
Los nuevos trenes circularán sin conductores en modo totalmente automático. Este sistema proporciona los máximos niveles de fiabilidad y seguridad, gracias a una tecnología puntera aplicada a la supervisión de la circulación y la eliminación del error humano. También cabe destacar la mejora en eficiencia energética que ofrecen estos nuevos trenes.
El proyecto de las líneas 3 y 6 es el más relevante en la historia de Metro Santiago y supone uno de los mayores hitos de infraestructura en ejecución a nivel nacional. Se prevé que integre a más de un millón de potenciales usuarios a la red, a través de 28 nuevas estaciones.