La movilidad inteligente genera importantes beneficios para los operadores y hace del ferrocarril un medio cada vez más atractivo para los viajeros. El desarrollo de la operación automática y autónoma de los trenes es un elemento clave para impulsar el aumento de la capacidad de transporte, la eficiencia energética, la puntualidad y la comodidad y fluidez del viaje de puerta a puerta.
CAF invierte sus esfuerzos en el desarrollo de diversas tecnologías emergentes, como las comunicaciones seguras, la tecnología de visión artificial y la digitalización en general.
Los primeros pasos hacia la explotación automática de trenes (ATO) han demostrado enormes beneficios, como el aumento de la capacidad, la reducción del consumo de energía, el aumento de la puntualidad o la reducción de los costes de explotación, entre otros.
De hecho, el futuro ecosistema de movilidad inteligente previsto requerirá mayores grados de automatización, por lo que se está llevando a cabo una migración suave hacia la explotación de trenes sin conductor (GoA4) es decir, una solución modular y evolutiva, considerando el uso de ATO sobre ETCS o incluso en la zona no ETCS utilizando la información de señalización lateral.
Además, se habilitará la función de conducción y mando a distancia cuando el funcionamiento de la ATO entre en modo degradado. Existe una demanda creciente de conducción de vehículos ferroviarios a distancia en escenarios operativos específicos, como depósitos o patios de maniobras, como paso intermedio antes de automatizar completamente dichos entornos.
Las funcionalidades del vehículo autónomo requieren información precisa sobre la ubicación del vehículo en la infraestructura en la que opera.
Las tecnologías actuales permiten el desarrollo de algoritmos integrados en la electrónica de a bordo que permiten obtener la localización del vehículo en tiempo real y de forma segura.
La automatización y la autonomía de los activos ferroviarios pretenden hacer realidad la movilidad inteligente, lo que supondrá importantes beneficios para los operadores y hará del ferrocarril un modo de transporte cada vez más atractivo para los pasajeros.
La consecución de este grado de automatización en el ferrocarril se basa en las nuevas tecnologías emergentes:
La automatización y las funcionalidades relacionadas con la operación sin conductor requieren poder gestionar adecuadamente las flotas de forma remota. Además, esta gestión debe realizarse con altos grados de fiabilidad y disponibilidad para garantizar la calidad del servicio.
Para ello, es imprescindible trabajar en tecnologías de comunicaciones seguras y aplicar conceptos de ciberseguridad en la solución global.
CAF aplica las últimas tecnologías para integrar las mejores soluciones: